• Con un presupuesto de 470.000 euros, tienen como objetivo restaurar los daños provocados por el paso de la borrasca Gloria
7 de julio, 23.- La Confederación Hidrográfica del Ebro (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico) ha iniciado el proyecto de “Recuperación de la capacidad hidráulica del tramo final del río Siurana tras los daños de la borrasca Gloria”, en Tarragona, con un presupuesto de 470.000 euros.
El río Siurana es uno de los últimos afluentes del río Ebro por su margen izquierda y se nutre de las aguas de las sierras de Prades y Montsant. En sus últimos 5 km de tramo final es un río ancho con un lecho de gravas, morfología trenzada y parcialmente rectificado y repoblado en el siglo XX, sobre todo con pinos.
En enero de 2020 se produjo una avenida extraordinaria como consecuencia de las precipitaciones de la borrasca Gloria que generó importantes daños en el tramo final de la cuenca del Ebro, en los municipios de García, El Molar y el Masroig, en Tarragona.
En el Siurana, la vegetación arrastrada por la avenida había generado obstrucciones que fueron retiradas de forma urgente por la CHE. Además, el torrente de agua provocó importantes erosiones y se generaron islas de sedimentos. Los acúmulos de sedimentos en el cauce y en las islas hacen que el agua siga provocando más erosión y acúmulos. De modo que, en caso de una nueva avenida, el cauce tendría una morfología idónea para que los daños fueran otra vez graves.
Con el nuevo proyecto se pretenden solucionar los problemas de erosión reconformando el cauce y favoreciendo la recuperación de vegetación en un tramo de 5,1 km.
Ebro Sostenible
Estos trabajos responden a los ejes de gestión de la CHE por un Ebro Sostenible, en concreto la renovación de la visión de la dinámica fluvial (eje 4), que persigue mirar a nuestros ríos con una visión renovada que permita favorecer su recuperación ambiental.
Los otros cuatro ejes son: la mejora del conocimiento (eje 1), que busca incorporar las mejores técnicas y las últimas investigaciones en la gestión de la demarcación hidrográfica del Ebro y facilitar su difusión a toda la ciudadanía; la mejora de su gestión, buscando la mayor eficiencia en los sistemas (eje 2); alcanzar el buen estado de las masas de agua con medidas para disponer de un medio hídrico y de sus ecosistemas asociados con condiciones ambientales cada vez mejores (eje 3), y la garantía del suministro a los usos esenciales (eje 5).
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